El sistema de castas o la arqueología del presente de Giovanni Collazos
Por Camila Opazo Sepúlveda
En el marco del día internacional de las personas migrantes, celebramos las prácticas testimoniales, los ejercicios autocartográficas, la escrivivencia y las tramas de la narrativa migrante escrita en primera persona.
En esta disputa (urgente) por la memoria histórica la entrañable Camila Opazo Sepúlveda, reseña el poemario “Sistema de castas” del poeta y activista Giovanni Collazos. Les invitamos a leer el poemario.
El proyecto político de la descolonización exige una premisa necesaria – y urgente – a la hora de plantear objetivos y estrategias de acción: la de deshacernos de las repercusiones materiales, políticas, ideológicas, estéticas, epistemológicas, territoriales [y más] que el colonialismo ha dejado en todas las existencias. Así, descolonizar no tiene que ver con la aceptación de la diversidad cultural, ni con la incorporación de miradas otras a la historia global. Por el contrario, descolonizarnos requiere de la transformación total del mundo tal y como hoy lo conocemos.
La transformación radical del mundo no sucederá, como tampoco ha sucedido la ordenación mundial actual, por arte de magia ni por azar. La socióloga boliviana de origen aymara Silvia Rivera Cusicanqui nos recuerda que, si el sistema moderno colonial ha necesitado siglos, legislaciones, instituciones, y múltiples acciones organizadas, sistemáticas y planificadas en todos los ámbitos de la vida para su creación y mantención, despojarnos de él demandará de esfuerzos similares. Es por eso que cada uno de los ejercicios que se inscriban en este quehacer decolonial, deviene imperioso, valioso y necesario como acto de rebeldía ante la dominación. El séptimo libro del poeta Giovanni Collazos, titulado “Sistema de castas” también lo es. Este funciona tanto como un recordatorio de la injusticia colonial fundante, y como un tejido de hebras que abrazan aquello que, en palabras del artista y escritor chileno Franscisco Godoy, identificamos como “la pena perpetua del colonialismo”.
Este tejido labrado a través de gestos emocionales que es “Sistema de Castas”, va hilando narrativas de la rabia y la frustración, con las de la nostalgia y la ternura. El desencanto y la desesperanza que expresan los versos de “Sistema de castas”, aunque calan visceralmente durante su lectura, a la vez accionan el despertar anticolonial requerido para este imperioso cambio de mundo. Es también la hebra de la denuncia y la insatisfacción de las maneras en que las jerarquías coloniales se reproducen en la actualidad, la que convierte a este poemario en un fragmento sólido e inquisitivo que incita a la búsqueda de una justicia negada por siglos para las mal llamadas “minorías” no-occidentales.
Citando a la investigadora ecuatoriana Mafe Moscoso, diría que los poemas de Giovanni Collazos en “Sistemas de castas” <desintegran el hechizo> de la promesa incumplida de la felicidad en el mundo occidental moderno. Con la agudeza que le concede la experiencia biográfica de la migración en trayectoria Sur-Norte (lo que es lo mismo: ex–colonia/metrópoli), Collazos desbarata el mito de la integración, evidenciando los mecanismos coloniales que impiden unas condiciones de vida digna para las personas y comunidades migrantes en la Europa fortaleza. La violencia colonial que supone la jerarquía racial heredada de otros siglos se hace tangible en múltiples formas de exclusión para las personas que migran. La negación de participación política, la falta de atención sanitaria, la burocracia en los trámites de extranjería, la precarización laboral, la política de fronteras, la segregación y discriminación étnica en el mercado inmobiliario, la deshumanización de personas en procesos migratorios y la existencia de monumentos coloniales que nos recuerdan tantas muertes anteriores, son algunas realidades contemporáneas que Collazos reconstruye a través de sus versos para mostrar la continuidad de este sistema de castas de origen colonial en la actualidad.
El poemario deviene igualmente en un ejercicio de contra-memoria histórica, ya que se materializa como un aporte en la labor de recordarnos aquella historia que nos ha sido negada en las escuelas y los museos: la del origen de nuestra posición actual en el mundo. Es por eso, que no resulta fácil sostener la lectura de cada verso, pues ellos son entendidos primeramente por el cuerpo, antes que por la razón. Y es que el sistema de castas inaugurado con la modernidad occidental desde el inicio de la invasión castellana a AméricaAbya Yala, lo entendemos mejor cuando nos dejamos traspasar por la narración de las experiencias de las vidas rotas y los cuerpos-territorios extinguidos que el colonialismo ha dejado y continúa dejando en su misión civilizatoria global.
Escrito en sus propias formas y reglas de la lengua, “Sistema de castas” constituye una contranarrativa rebelde y valiente: se atreve a confrontar los discursos de la historia oficial, pero también los cánones de los lenguajes literarios y gramaticales impuestos por las sucesivas colonizaciones y sostenidas hasta la actualidad en nombre de los estados nación y las reales academias. Parte de la magia de este libro, en mi parecer, está en que logra llevarnos a las emociones agudas y dolientes de la experiencia colonial, pero también ayuda a resarcir el dolor. Entre versos hilados de emociones, sentires y pensares, nos suaviza y repone las heridas, al volver a pasarnos por el corazón nuestras tierras de origen, sus olores y entrañables sabores. Así, las palabras y expresiones que nos infiltran nos llevan también a la calma, al recordarnos los cantos que allí escuchamos, los ritmos que allí danzamos, las palabras con las que allí nos nombramos y las lenguas en las que allí fuimos comprendidoes. Nos remite a nuestras comunidades de afecto y de sentido, para encontrar una energía vital ante el pesimismo aplastante del cotidiano sin descanso.
El desprecio colonial histórico que vemos y sentimos ratificado en el presente, nosotroes que hemos sido sacadoes de nuestras vidas por dinero, encuentra en este poemario, un arma de renovación de la manera en que comprendemos y habitamos el mundo. La llamada a despertar la larga memoria ancestral no significa una invitación a recuperar un pasado perdido e idealizado al cual se nos achaca, deseamos volver. Sino por el contrario, apunta a una micropolítica cotidiana de localización y conocimiento situado, capaz de configurar una alternativa epistemológica disidente que atente contra la construcción hegemónica del conocimiento. “Sistema de castas” se constituye así, como un discurso político y poético que logra entretejer lo histórico con lo íntimo, lo personal con lo colectivo, lo pasado con lo presente, lo dicho con lo silenciado. Esta manera fronteriza de pensar, sentir y escribir a la que nos invita Collazos, nos recuerda a las escrituras y epistemologías mestizas que nos propuso la poeta y pensadora chicana Gloria Anzaldúa hace ya un par de décadas desde la frontera Mexicana-Norteamericana. Tanto su escritura, como su lectura se convierten en necesarias y urgentes, porque son las que alimentan la imaginación política requerida para la construcción y ensoñación de nuevos horizontes de vida posibles.